martes, 11 de enero de 2011

Un mail cualquiera, una lectura posible: "¿Ser de izquierda o de derecha?"


A partir de este mail (“¿Ser de izquierda, o de derecha?”, que copio a continuación bajo el título "MAIL RECIBIDO"), me sentí completamente llamado a dar una respuesta, sobre todo porque entiendo que el mail (mucho más allá del debate o de la “moraleja” que quiera transmitir) no está armado con seriedad ni, cuando menos, prolijidad como para confrontar productivamente posiciones de derecha e izquierda.Me parece que profundizar el debate sobre los que adoptan una u otra posición puede ser muy útil, siempre y cuando se haga a partir de textos consistentes, coherentes, en otras palabras: sin trampas. Este mail es un ejemplo más de lo que suele circular al respecto.
Quisiera que le des una oportunidad a mi respuesta, y que potencialmente generes la tuya también, para que, al menos, un mail de entre 100 millones quede en la memoria y sirva para algo.


MAIL RECIBIDO:

SER DE IZQUIERDA ???? O DE DERECHA ????
Una universitaria cursaba el último año de sus estudios en la Facultad.
Como suele ser frecuente en el medio universitario, la chica pensaba que era de izquierda y, como tal, estaba a favor de la distribución de la riqueza.
Tenía vergüenza de su padre. Él era de derecha y estaba en contra de los programas socialistas.
La mayoría de sus profesores le habían asegurado que la de su papá era una filosofía equivocada.
Por lo anterior, un día ella decidió enfrentar a su padre.
Le habló del materialismo histórico y la dialéctica de Marx tratando de hacerle ver cuán equivocado estaba
al defender un sistema tan injusto.
En eso, como queriendo hablar de otra cosa, su padre le preguntó:
-¿Cómo van tus estudios?
-Van bien -respondió la hija, muy orgullosa y contenta-.Tengo 9 de promedio, hasta ahora. Pero me cuesta mucho trabajo, no voy a bailar, no salgo, no tengo novio y duermo cinco horas al día, pero, por eso ando bastante bien, y voy a recibirme en término.
Entonces el padre pregunta:
-Y a tu compañera de departamento Soledad , ¿cómo le va?
La hija respondió muy segura:

-Bastante mal, Sole no se exime porque no alcanza el 6,(tiene 4 de promedio), pero ella se va a bailar, pasea, estudia lo mínimo, y falta bastante... no creo que se reciba, por lo menos este año.
El padre, le respondió:
-Entonces hablá con tus profesores y pedile que le transfieran 2,5 de los 9 puntos tuyos a ella. Esta sería una buena y equitativa distribución de notas porque así las dos tendrían 6,50 y aprobarían las materias.

Indignada, ella le respondió:-¡Estás loco Pà? ¡Me mato estudiando para tener 9 de promedio! ¡Te parece justo que todo mi esfuerzo le pasen a alguien, que no se preocupa por su carrera! Aunque la persona con quien tengo que compartir mi sacrificio sea mi mejor amiga... ¡¡No pienso regalarle mi trabajo!!

Su padre la abrazó y le dijo: -¡Bienvenida a la derecha!

Todos somos rápidos para repartir………… lo que es ajeno.
Es muy cortito, tremendamente claro y se aplica 100% a nuestra realidad social:
“Planes Trabajar”
“Jefes y Jefas de familia”
“Asignación por hijo”
“Prebendas Políticas”, etc..etc..
Pensamiento de A.Rogers (1931)
Todo lo que una persona recibe sin haber trabajado
para obtenerlo, otra persona deberá haber trabajado para ello, pero sin recibirlo..El gobierno no puede entregar nada a alguien, si antes no se lo ha quitado a alguna otra persona.
Cuando la mitad de las personas llegan a la conclusión de que ellas no tienen que trabajar porque la otra mitad está obligada a hacerse cargo de ellas, y cuando esta otra mitad se convence de que no vale la pena trabajar porque alguien les quitará lo que han logrado con su esfuerzo, eso...
...es el fin de cualquier Nación.

“No se puede multiplicar la riqueza dividiéndola”.

Dr. Adrian Rogers, 1931
No me preocupa el grito de los violentos……...
de los corruptos………
de los deshonestos………de los sin ética...
Lo que mas me preocupa es el silencio de los buenos.

Martin Luther King.

Si no estas de acuerdo, no lo pases.
Como estoy de acuerdo… lo paso!!!

RESPUESTA AL MAIL:

Encontré en el mail un problema. Tiene que ver con la no adecuación. El acontecimiento A no equivale (difícilmente podría compararse en algún término) al acontecimiento B: la situación en donde alguien se rehúsa a compartir su promedio académico con un amigo que se rasca no es ni por asomo similar a la situación en donde una importante porción de la sociedad (pobres estructurales, si se quiere) es asistida con Planes trabajar o el que fuere. Las premisas no son iguales, lo que está en juego difiere, las consecuencias son tan lejanas entre sí que sólo en un mail efectista y escrito en un caprichoso borrón podrían “encontrarse” (muy entre paréntesis)
Sobre todo estoy pensando en lo que agrega al final de la anécdota: “[este mail] es muy cortito, tremendamente claro y se aplica 100% a nuestra realidad social”. Esa frase no podría ser más que una lamentable expresión de deseo, y nada más. Si fuese honestamente “claro y aplicable a nuestra realidad” ¿no debería hacer un mínimo comentario sobre el “materialismo histórico y la dialéctica de Marx” que trae tan livianamente a cuento? ¿Qué pertinencia podría tener esa teoría y qué suma en un debate sobre la distribución de la riqueza? ¿Qué es lo que “aclara” realmente?
Sé muy bien que los mails y las cadenas se leen de un tirón, cuando uno tiene unos segundos de respiro en la oficina o donde sea, por eso voy a puntear lo que pienso rapidito. Respecto de la mala adecuación, la mayor distancia que percibí tiene que ver con las condiciones de los participantes. Esto es importante. En un caso se trata de dos amigas con condiciones similares: a ambas les da el bocho (y el bolsillo) como para estar en la universidad.
Distribuir el promedio sí es absurdo cuando uno se esfuerza y el otro, con las mismas capacidades, no lo hace. Ahora bien, y del otro lado ¿cuál es la tarea del Estado respecto de la desigualdad (abismal en Argentina) social? ¿no es su responsabilidad buscar el equilibrio de condiciones? Una vez establecidas las mismas posibilidades para las personas, recién ahí nos invito a todos a competir y sacarnos los ojos por quién tiene el televisor más grande. Pero no antes. Nunca antes de lo primordial: empezar la carrera (sea cuál sea la que corramos) todos desde la misma línea de partida. Creo que el reclamo es elemental.
Por acá saltan además los tapones de nuestra clase media: creemos vanamente que todo lo que tenemos y tuvimos lo ganamos, y que los pobres o delincuentes viven así porque quieren o porque no lo intentaron lo suficiente como para merecer un pedazo de la torta. De ahí ese término tan de moda en los noticieros: el “malviviente”, es decir, aquél que eligió vivir mal. Pero, respecto a las elecciones, ¿quién elige con qué familia nacer? ¿quién de nosotros pudo elegir entre la cuna de oro o la de madera? ¿quién de nosotros eligió a qué escuela primaria asistir? ¿y a quién tenemos por hermanos y hermanas? ¿y por vecinos?
Es hora de darnos un necesario baldazo de agua fría: a las clases sociales las rige el azar. Nadie discute los éxitos y derrotas que uno obtiene luego en el transcurso de la vida, completamente responsabilidad de cada uno. Pero no nos olvidemos: no todos empezamos nuestras vidas desde el mismo punto, desde la misma comodidad, desde la misma familia o instrucción educativa. En última instancia, será decisión nuestra determinar si queremos equilibrar la balanza para aquellos que, como en la lotería, nacieron sin la contención familiar y económica que tuvimos la suerte de recibir nosotros, flamantes lectores de mails inconsistentes que circulan y circulan.

Citas: Adrian Rogers y Martin Luther King


¿Quién es el tal Dr. Adrian Rogers, al que apelan para reforzar la idea? Bueno, una googleada devela rápidamente el misterio: nació en 1931, falleció en el 2005 y es un pastor estadounidense, mejor dicho, un muy conservador pastor estadounidense. La teología que predica es conservadora y evangélica, según dice el artículo. Todo esto no lo traigo para desacreditar el pensamiento de un pastor (que puede ser perfectamente viable y productivo) pero sí para desacreditar a quien/es redactaron este mail, al no poner la información suficiente que un lector cualquiera de nosotros necesita para entender (con transparencia, como promete pero no cumple) su opinión. Basta ver la fecha que pone el mail entre paréntesis antes de citarlo (“1931”) para entender que, además de que difícilmente (con sólo meses de edad) Rogers podía modular alguna palabra ese año, lo único que importaba era traer a alguien cualquiera que suene importante para legitimar lo que uno dice.

Sin embargo, eso no es todo. De ahí vamos sin escalas a una cita de Martin Luther King. De él probablemente sepamos un poco más: pastor también, también estadounidense, de la iglesia bautista. Nacido en el 29, asesinado a quemarropa en el 68. Pueden googlearlo o comprar un libro sobre él y darse una panzada. Debo confesar que me enojó (me dolió más que enojarme) que este mail lo haya traído a él como personalidad que acredita este tipo de ideas. No tuve que hurgar mucho (en wikipedia nuevamente) para ahogarme en revisiones históricas que demuestran que Martin Luther King se pararía (y se paró) con orgullo en la vereda contraria a la derecha, por ejemplo:

“Expresaba con mucha frecuencia su oposición a la guerra y la necesidad de redistribuir los recursos para corregir las injusticias raciales y sociales.
Y aunque en sus alocuciones públicas era reservado a la hora de adscribirse ideológicamente, con el fin de evitar ser etiquetado como comunista por sus enemigos políticos, en privado declaraba habitualmente apoyar al socialismo democrático:[53]

“Ustedes no pueden hablar de una resolución del problema económico de los negros sin hablar de millones de dólares. Ustedes no pueden hablar del fin de las chabolas [favelas, villas en nuestro caso] sin decir primero que los beneficios no pueden conseguirse gracias a las chabolas. Ustedes en verdad falsean la realidad porque tienen negocios ahora con la gente. Ustedes tienen negocios con los capitanes de la industria […] Eso significa ahora que ustedes se mueven en un mar agitado, porque eso significa que hay algo que no funciona con... El capitalismo... Debe haber una mejor distribución de la riqueza y puede ser que América tenga que dirigirse hacia un socialismo democrático.”

Para legitimar el mail, un extrañísimo sistema de citas. Nuevamente, falta de adecuación. En este caso, al menos, algo corresponde: ambos son pastores. Luego, ni el color de la piel (ni el de los ideales) podría jamás hermanarlos en una misma dirección ideológica, a menos que un mail decida unirlos caprichosamente, sabiendo que nadie iría a investigar realmente quiénes son las personalidades que son cortadas y pegadas en un mail más hábil para los efectos que para los razonamientos.


Lo último: no es mi intención, repito, desacreditar a la derecha. La discusión sobre las posiciones de derecha y de izquierda es sumamente compleja, interesante y necesaria. Pero debe realizarse con otra seriedad, con otra densidad, y con menos cuentitos reduccionistas. Marx no es simplemente un barbudo que hablaba sobre distribuir la riqueza ni sobre, como dice el mail,
“repartir lo ajeno”.
Martin Luther King no era, ni por asomo, cercano a la derecha: vivió su vida combatiéndola y predicando a favor de la distribución de la riqueza.
Tampoco estoy diciendo que los Planes Trabajar y demás son la solución, ni siquiera estoy diciendo que es una medida política útil.
Estoy planteando algo en otro lugar: estoy diciendo que este mail debe ser descartado para pensar la cuestión, porque está minado de contradicciones y manipulaciones en todos los niveles posibles. Estoy diciendo que discutamos si
los planes de distribución de la riqueza son útiles o inútiles, si hay que modificarlos o anularlos, pero que lo hagamos confrontando todas las variables y con un nuevo enfoque, porque el de este mail no tiene ni pies ni cabeza, ni puertas ni ventanas: es un montón de ladrillos mal apilados en medio del desierto.
Ya que se lo citó tan mal a Martin Luther King, me tomo el atrevimiento de ofrecerles una contra-cita, tomen lo que les sirva de ambas:

“Las personas se odian porque se temen; se temen porque no se conocen; no se conocen porque no se saben comunicar; no se saben comunicar porque se hallan separadas”

M.L. KING - Stride Toward Freedom : the Montgomery Story (1958)


Espero que esto desate otras opiniones, gracias.

REVISTA surREALISMO

2 comentarios:

  1. el colorado (que no es de narvaez)18 de enero de 2011, 13:28

    Para mi el mail que te mandaron fue pergeniado por alguien de una mentalidad similar a la de Abel Posse, F. Von Hayek, Luis Palau y Luis Majul. Una mezcla alucinogena y letal para la salud.

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  2. Colorado que no sos de Nárvaez, se me acaba de ocurrir que ahora que Palau hace mucho que no dá sermones en la 9 de Julio de dedica a fabricar spam! Mmmm

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